Esta receta es para disponer de un pan para el desayuno
100 ml leche entera templada
125 g yogur natural
100 g azúcar
80 ml aceite de girasol
1 cucharita vainilla
1 huevo
500 g harina
1 sobre 7 g levadura
Ralladura (de cáscara) de un limón
Introducir en un bol la harina, levadura y dos cucharadas de azúcar (de los 100g) y mezclar bien.
En otro bol grande, introducir la leche templada, el yogur, el resto de la azúcar, la ralladura de limón, la vainilla y el huevo y mezclar bien. Añadir poco a poco la harina (con la levadura y azúcar) hasta tener una mezcla algo pegajosa.
Poner algo de harina sobre la mesa y poner encima la masa. Amasa, añadiendo poco a poco harina a la mesa hasta que no se pegue la masa a las manos. La masa final tiene que quedar esponjosa y elástica.
Espolvorear un poquito de harina en un bol grande e introducir la masa. Hacerle un corte en forma de + encima. Tapar con un trapo y dejar en un sitio templado/cálido durante dos horas. La masa tiene que triplicarse en tamaño.
Precalentar el horno a 180ºC. Poner papel de horno sobre una
bandeja a prueba de horno.
Poner un poco de harina sobre la mesa y la masa encima. Estirar la mesa con los dedos hasta tener una forma de cuadrado de unos 8cm cuadrados. Hacer 2 dobleces, de arriba al centro y de abajo al centro. Usar un rodillo para estirar bien la masa a una forma rectangular de un grosor de mínimo 0,5 cm. Cortar en tiras a lo largo del rectángulo, las tiras de un centímetro aproximadamente, garantizando un número divisible por tres. Cortar todas las tiras a la mitad.
Trenzar en grupos de tres, apretando (aplastando) muy bien el inicio y final de la trenza para que no abran en el horno. Deben salir ocho trenzas.
Poner sobre la bandeja a prueba de horno y tapar, dejando reposar 20 minutos.
Introducir en el horno 20 minutos. Al sacar, usar un pincel de repos- tería para poner una capa fina de agua sobre cada trenza y luego poner sobre una rejilla para enfriar. |